martes, febrero 06, 2007

Turismo de órganos y pena capital en China

Según Amnistía Internacional (http://www.es.amnesty.org/temas/pena-de-muerte) en el año 2005 China ejecutó alrededor de 1.770 personas, un 95% del total de ejecutados en todo el mundo.

No tengo ni idea cómo calculan la cifra, ya que el gobierno chino nunca revela las cifras de ejecutados. AI reconoce que la cifra es estimada, y que incluso hay expertos en China que mencionan que son alrededor de 8.000 personas las ejecutadas cada año.

Según la misma fuente, son 68 los diferentes delitos por los cuales uno puede ser condenado a la pena de muerte, incluyendo malversación de fondos (por este es que ejecutan los funcionarios estatales corruptos) y tráfico de drogas.

En octubre del año pasado el Congreso chino aprobó una reforma para que todas las sentencias condenando a la pena capital sean revisadas por la Corte Suprema de Justicia, puesto que desde 1983 dichos casos solo tenían apelación ante las cortes provinciales; la publicación reciente en los medios de varias historias sobre condenados ejecutados erróneamente creó el ambiente para la reforma mencionada.

Hace unos días en Canadá se publicó un reporte (denominado "Matas-Kilgour" con base en los apellidos de sus autores) sobre el mercado de órganos para transplante proveniente de prisioneros ejecutados en China.

Es vox populi el hecho de que cada vez en mayor número viajen a China ciudadanos norteamericanos, europeos y del sureste asiático con el fin de obtener trasplantes de órganos, a precios más baratos que en su países y con una mayor posibilidad de encontrar rápidamente donante.

El reporte mencionado pone de presente que en los hospitales militares donde se realizan trasplantes, los órganos normalmente provienen de prisioneros locales condenados a la pena capital, cuya ejecución se acelera por la existencia del paciente esperando "donante". Es decir, locales y extranjeros tienen el chance de encontrar rápidamente el órgano compatible.

La noticia no es nueva ya que desde mediados de los 80's existen reportes al respecto.

Al parecer, la página oficial del reporte en internet es esta:

http://www.organharvestinvestigation.net/

Sin embargo, como era de esperarse no es posible verla acá en China.

Cómo ejecutan a los condenados en China es uno de los capítulos del libro "China Candid: The people on the People´s Republic", aunque las ejecuciones narradas no son las hechas con inyección letal. Lo único que vale la pena contarles es que, según el relato, normalmente en los pueblos y ciudades pequeñas los condenados son trasladados de la cárcel al sitio de ejecución en un camión descarpado donde llevan colgados unos carteles con su nombre y los crímenes cometidos en una especie de parada o desfile para que los vean los transeúntes; además de lo anterior, llevan una soga al cuello que le permite a los guardias apretarla para callarlos en caso de que decidan gritar algo al público. No mueren bajo pelotones de fusilamiento, sino con disparos a quemarropa en la nuca.

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1 Comentarios:

Blogger bobby fletcher dijo...

The organ harvesting allegation came from the quasi-religious sect Falun Gong, and it has been discredited by multiple undercover investigations.

http://usinfo.state.gov/xarchives/display.html?p=washfile-english&y=2006&m=April&x=20060416141157uhyggep0.5443231&t=livefeeds/wf-latest.html

http://www.usembassy.it/pdf/other/RL33437.pdf (section CRS-7)

http://www.zonaeuropa.com/20060806_1.htm

http://www.cicus.org/news/newsdetail.php?id=6492

5:53 a. m.  

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